
Los sismos que se han presentado en los últimos días en Planadas (Tolima) han causado zozobra entre la comunidad, no solo de Risaralda sino de las diferentes regiones del país en las que se han sentido los movimientos telúricos, más aún porque se dieron días después de conmemorarse los 20 años del terremoto que sacudió la zona del Eje Cafetero y que dejó grandes afectaciones y un número considerable de víctimas.
Frente al desconocimiento y falsa información se esparcen rumores como el que estos temblores son el anticipo de un movimiento de mayor magnitud que puede ocasionar una tragedia similar o peor a la que se presentó el 25 de enero de 1999 en Armenia y Pereira, es por eso que el llamado de las autoridades es acceder a información a través de la páginas oficiales, con el fin de evitar generar pánico.
Sin embargo la directora de Geoamenazas del Servicio Geológico Colombiano, Martha Calvache, informó a través de un video difundido por diferentes canales de comunicación que “la situación no es para alarmarse debido a que la zona del volcán Nevado del Huila presenta muchas fallas geológicas y en el pasado se han presentado sismos de magnitud 6.2 muy cerca del volcán”, explicó Calvache.
Actualmente la entidad se encuentra haciendo seguimiento a la actividad del volcán ya que desde el día sábado hasta el momento se han registrado más de 5100 sismos y se pretende determinar si los mismos tienen alguna procedencia volcánica más que tectónica. Dichos movimientos se presentan de manera constante y solo pueden ser percibidos a través de las herramientas tecnológicas con que cuenta el Servicio Geológico Colombiano.
Risaralda
Aunque los recientes temblores se han presentado en el sector del volcán del Huila, hay igualmente preocupación en la comunidad risaraldense ya que la región también se encuentra es zona sísmica y volcánica propensa a que se presenten este tipo de situaciones.
Como lo explicó el geólogo y coordinador de gestión del riesgo de la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, Jaime Guzmán, en Risaralda se pueden presentar sismos de carácter superficial como el que sucedió en el año 1999 y profundos como el ocurrido en el año 1995.
“Cada uno de estos eventos causa daños de diferentes maneras, por el tema de la transmisión de ondas y ocasionalmente los temblores superficiales, hablando de una profundidad de 30 kilómetros, pueden causar más daños en las edificaciones”, expresó el geólogo.
Así mismo explicó que en términos generales dichos fenómenos naturales no tienen nada que ver con la actividad volcánica, ya que estos no suelen llegar a magnitudes tan altas como las que se pueden dar en un sismo, sin embargo esos movimientos pueden tener injerencia en la actividad del volcán causando desplazamientos de masas internas y alterar las funciones del mismo.

No es predecible
Explicó Guzmán que en términos generales los sismo no se pueden predecir y se pueden presentar situaciones llamadas sismos precursores los cuales se generan cuando hay acumulación de energía en las placas tectónicas, “pero no hay manera de determinar en qué lugar se está presentando dicha acumulación de energía y poder determinar el momento exacto del movimiento”, agregó el geólogo.
No son dañinos
Agregó igualmente que los sismos no son los responsables de causar los daños en las zonas pobladas de las regiones, sino la formas como son construidas las edificaciones.
“La responsabilidad recaería en las autoridades y cómo están preparados para afrontar un fenómeno de este tipo y la forma en que se han realizado las construcciones, ya que estas deben acomodarse a las condiciones del territorio en donde se vayan a realizar”, agregó el funcionario de la Cárder.
Desde 1997 el país cuenta con el estudio de zonificación de la amenaza sísmica, que divide el territorio en tres tipos o niveles de amenaza: alta, media y baja. De igual manera, con base en este estudio se generó el primer Reglamento de Construcciones Sismorresistentes NSR 98, que fue actualizado en 2010.
Liberan energía
Por estar ubicados en el Cinturón de Fuego del Pacífico, situado en las costas del océano Pacífico, se caracterizan por concentrar algunas de las zonas de subducción más importantes del mundo, lo que ocasiona una intensa actividad sísmica y volcánica en los sitios que abarca; es normal que en el país se presenten movimientos telúricos tanto superficiales como profundos.
A pesar de esta situación dichos movimientos pueden ser considerados beneficiosos ya que de esta manera se libera energía que puede estar acumulada en las placas tectónicas, evitando que se provoque un movimiento catastrófico.
¿Cómo reaccionar?
Cuando ocurre un sismo o cualquier otra emergencia, la clave es conservar la calma, esto le permitirá actuar con mayor seguridad. En la medida en que se haya preparado, documentado y participado en simulacros lo que se debe hacer con su familia, más fácil será para todos afrontar de la mejor manera la situación de emergencia. Una vez se presente un sismo, “lo primero es buscar protección”.
Si está en una construcción sismoresistente, ubíquese cerca de columnas, bajo un escritorio o en las zonas demarcadas como seguras, siempre lejos de vidrios o elementos que puedan caer.
Si se encuentra en una construcción informal, trate de salir de inmediato y durante la salida vigile su entorno para identificar peligros durante la evacuación.
Nunca use ascensores para evacuar.
No se ubique bajo los marcos de las puertas, ya que no es un lugar seguro, el marco ayuda a disipar la energía del sismo, por lo cual puede romperse y colapsar.
Si está en la calle, observe su entorno y busque un lugar seguro. Procure estar lejos de postes y cables. Aléjese de las fachadas pues pueden caer partes de la misma como ladrillos o vidrios, con precaución diríjase al centro de la calle, tenga cuidado con los vehículos, es muy posible que los conductores no sientan el sismo.
Si va conduciendo un vehículo en las calles de una ciudad o municipio y percibe un sismo, reduzca la velocidad y en lo posible deténgase en un lugar seguro (alejado de postes, cables, vallas, etc).
Fallas geológicas en Risaralda
En Risaralda hay cerca de 37 fallas geológicas que inciden en los 14 municipios, es de aclarar que no todas se encuentran activas ni representan una amenaza para la comunidad. El departamento es atravesado por el Sistema de Fallas de Cauca- Romeral.
Guzmán hace referencia a dos de estas que hacen que la región sea propensa a presentar movimientos telúricos:
1. Falla Quebrada Nueva, la cual pasa muy cerca al municipio de La Virginia (Risaralda) y Cartago (Valle).
2. Falla Silvia-Pijao, ubicada cerca al corregimiento San José, vía a La Florida.