Una dolorosa escena presenció la hija menor de José Rigoberto González, de 45 años de edad, cuando vio cómo un hombre le disparó en repetidas ocasiones a su padre, dejándolo gravemente herido.
El hecho de sangre se registró a las 9:10 de la noche del pasado miércoles, en la manzana II del barrio Villa del Sur de la Ciudadela Cuba, donde se encontraba José Rigoberto en compañía de su familia.
En el calor de su hogar disfrutaba de la compañía de su hija de tres años, sin saber que un detalle sería determinante para la tragedia que se avecinaba: Había olvidado cerrar la puerta de la casa.
Esto lo aprovechó el sicario para ingresar a la residencia y sorprender a su víctima, a quien le disparó sin piedad alguna dos disparos, uno en la cabeza y otro en un costado.
Luego de cometer el crimen el sujeto huyó del lugar, mientras sus familiares reaccionaron en forma inmediata y lo trasladaron en un vehículo particular hasta el hospital de San Joaquín, pero debido a la gravedad de sus heridas fue remitido al hospital San Jorge, de Pereira, y luego de ser intervenido por los médicos le diagnosticaron muerte cerebral, por lo que murió en la mañana de ayer.
Los gritos de dolor y las preguntas de por qué acabaron con la vida de Rigoberto, se escucharon en las afueras del centro asistencial por parte de sus familiares, luego de saber que había fallecido.
Miembros del CTI de Pereira realizaron la inspección del cuerpo y lo trasladaron a Medicina Legal.
Investigaciones
Aunque las autoridades judiciales continúan adelantando las investigaciones para dar con el responsable del crimen y esclarecer los móviles, sus familiares y amigos manifestaron que el hoy occiso era una buena persona, que nunca le conocieron problemas o algún tipo de amenazas y que por el contrario era un hombre entregado a Dios por lo que les parece extraño lo que sucedió.
