Aunque el Concejo de Dosquebradas, no ha sido llamado a sesiones extraordinarias por el ejecutivo municipal, la mesa directiva viene preparándose para iniciar sus labores como organismo coadministrador el próximo 1 de marzo.
En tal sentido, el presidente de la Corporación, Miguel Ángel Rave Rojo anunció la agenda de trabajo que resumió en tres puntos, destacando el propósito de lograr la certificación de calidad, para convertirse en el primer concejo risaraldense en obtenerlo; para tal efecto se creo un equipo conformado, además de Rave Rojo, por los vicepresidentes Carlos Hugo Toro y Miguel Ángel Correa, junto con la secretaria general, Sandra Julieth Posada.
Entre otras metas, el Concejo dosquebradense para este año hará un trabajo en el fortalecimiento institucional en cuanto a gestión documental y de archivo, actualización de inventario de bienes, plan de bienestar social y plan de compras.
En lo que tiene que ver con participación comunitaria, acompañará a las seis comunas más atrasadas en la ejecución del plan de desarrollo “ayudándole al Alcalde a dinamizar los procesos y recordarle los compromisos”, y debate a fondo de los proyectos.
Falta diálogo
Frente a las relaciones entre el Concejo municipal y el alcalde, el presidente de la Corporación, Miguel Ángel Rave Rojo, dijo que aunque ha sido imposible la comunicación y no han logrado un diálogo firme con el mandatario, no le están haciendo oposición, dejando como prueba la aprobación del 99 % de los proyectos presentados.
Lo que si dejaron en claro los miembros de la mesa directiva, es que el alcalde Diego Ramos mintió cuando dijo que los concejales piden mucho o que piden mermelada, lo que pasa es que de lo público poco entiende y que de política poco sabe, que al electorado le metieron el cuento de un empresario que no es, que no gobierna la ciudad y que no volvió atender a la comunidad.
