
La construcción de restaurantes utilizando contenedores de carga, no es algo nuevo en el país, varias ciudades cuentan con este modelo, pero en Pereira la puesta en marcha de un sitio de este estilo, ha generado polémica, la cual ya esta tomando nuevas aristas.
A pesar de que el sitio ya está en funcionamiento, todavía hay procesos legales que se adelantan en contra el constructor de la obra, ya que según manifiestan desde la dirección operativa de Control Físico, este llevó a cabo los trabajos sin la respectiva licencia urbanística.
A hoy no se sabe cuál será el futuro de este sitio de comidas, ya que las sanciones que se pueden imponer, van desde multas económicas para el constructor, hasta la demolición del lugar.
Después de la rendición de cuentas de la Secretaría de Gobierno de Pereira, de la cual hace parte Control Físico, ante el Concejo Municipal, varios concejales pidieron la demolición de los contenedores, para dar ejemplo y evitar que mañana, cualquier persona llegue a la ciudad y adelante una construcción sin licencia. Este también ha sido el pedido de varios habitantes del sector de influencia de la obra, inclusive ya han iniciado acciones legales para este fin.
En este panorama, los más afectados con una posible demolición, son los jóvenes emprendedores que compraron un espacio en el lugar, sin conocer la problemática que había alrededor de la construcción del sitio.
Muchos de ellos es la primera vez que inician un negocio propio e invirtieron sus ahorros con la esperanza de sacar adelante este ‘sueño’, hoy en día no saben que puede pasar con sus ilusiones.
El proceso
La directora de Control Físico, Carolina González, manifestó ante el Concejo Municipal que “empezamos a realizar una serie de actuaciones sobre el predio donde se estaba realizando la construcción. La obra se suspende en el mes de noviembre del año pasado. Para el 5 de diciembre se expide una resolución de suspensión, donde se imponen los sellos y se ordena emitir copia a la Fiscalía General de la Nación por un supuesto fraude a resolución procesal”.
Aunque las contravenciones fueron evidentes por parte del constructor, según la norma, Control Físico le debe seguir el debido proceso.
“Nos encontramos en la etapa de formulación de cargos, ya se notificó esta a los posibles contraventores y hay que cumplir unas etapas procesales que establece el código contencioso administrativo. Sin licencia, hoy en día aprobada, la única contravención urbanística que se está violando, es construir sin licencia. Hasta que no haya un pronunciamiento efectivo por parte de la Curaduría Urbana, Control Físico no puede expedir ningún tipo de resolución”, acotó González.
Richard Bliss, habitante de la zona de influencia de la obra mencionada, aseguró que “agradezco la colaboración que nos ha prestado la dirección operativa de Control, pero concluyó en este tema de control físico que lamentablemente, no tienen las herramientas para trabajar, es una pena pero es la verdad”.
Él con otros residentes del sector de Pinares, elevaron un derecho de petición a la Asociación Colombiana de Ingeniería Sísmica sobre la obra mencionada y esa entidad emitió la siguiente respuesta: “no se tiene ningún tipo de normativa aplicable para las construcciones utilizando contenedores de carga para el transporte marítimo o fluvial, por lo anterior, la comisión reitera que no es posible utilizar contenedores de carga como edificaciones”.
Esta respuesta tiene que ver con el hecho de que en principio se pensaba que la construcción de Container Food Place, solo tendrían un nivel, pero según los denunciantes, la edificación tiene tres niveles en algunos sectores.
Los habitantes de la zona mencionada, le manifestaron a este medio de comunicación, que ellos no se oponen a los restaurantes que están en funcionamiento, su malestar es porque el constructor realizó la obra en un sitio que no cumple con el uso del suelo para los trabajos que se adelantaron y tampoco contó con una licencia urbanística para llevar a cabo e proyecto.
Los emprendedores
Camilo Vélez
“Este es un lugar para la familia, varios jóvenes emprendedores tenemos nuestras esperanzas puestas en este espacio, que no es ningún rumbiadero, no abrimos hasta tarde y no ponemos música a altos niveles, por eso no entendemos, porque algunas personas hablan de demoler el sitio”.
David Ángel
“Esto es un mall de comidas, no una discoteca. Varios jóvenes montamos el negocio porque nuestro target son las familias y aquí pueden compartir sin molestar a los vecinos, ni causando problemas de orden público. Somos gente emprendedora y muchos es la primera vez que empiezan un negocio”.
Natalia Ríos
“Estamos muy contentos con la respuesta de la ciudadanía. Aunque llevamos solo unos días de apertura, muchos pereiranos han venido al sitio. Este modelo de negocios de comidas ha tenido mucho éxito en otras ciudades del país y esperamos que Pereira no sea la excepción. Aquí le damos una experiencia a la familia”.