
Víctor Quinchía V.
El Diario del Otún
Aunque es apenas una etapa preliminar en la que se está identificando los sitios idóneos para esta práctica y falta la socialización con la comunidad, lo que se busca en la capital risaraldense es tratar a los consumidores como pacientes, personas enfermas que necesitan una atención por parte de los organismos del Estado.
En entrevista con El Diario del Otún, Jhon Jairo Lemus Mosquera, secretario de Desarrollo Social y Político, aseguró que “se quiere regular el consumo, creando unos espacios donde las personas puedan llegar a consumir, sin que esto afecte demasiado a la comunidad”.
El titular de dicho despacho agregó que “hay que tener claro que esto es un problema de enfermedad y por eso no podemos tratar a los consumidores como delincuentes. Por su condición debemos darles un tratamiento hasta llevar a estas personas a un proceso de recuperación”.
Estos sitios permitirían hacer una caracterización de los consumidores en la ciudad, porque no requiere la misma atención médica un adicto a la marihuana que uno a la heroína, por dar un ejemplo.
Las cifras
600 habitantes de calle han sido identificados en el censo de la Alcaldía.
100 personas en condición de calle es la capacidad del albergue.
Actualidad
En caso de que en la capital risaraldense se aprueben las zonas de permitido consumo, el proyecto no será en el corto plazo, por lo que el despacho mencionado adelanta la firma de convenios con Hogares Claret y el Hospital Mental de Risaralda (Homeris) para la atención psicosocial y terapéutica de dichas personas.
Lemus Mosquera señaló que las zonas estarían ubicadas en el área urbana de Pereira, porque no tendría sentido adecuarlas en la parte rural ya que muy pocos consumidores acudirían, teniendo en cuenta que una parte de los usuarios de estupefacientes como la marihuana, basuco, cocaína, bóxer, entre otros, son habitantes de calle.
El funcionario además manifestó que en la ciudad hay un alto consumo de sustancias psicoactivas, a causa de la problemática del microtráfico que ataca principalmente a los jóvenes.
En el municipio los expendedores de drogas ilícitas estarían utilizando la estrategia de las primeras 5 dosis gratis, con lo que ‘enganchan’ a los adolescentes.
Hay que tener presente que Pereira y Dosquebradas son 2 de las únicas ciudades del país que cuentan con el programa Cambie, que consiste en entregar un kit para el consumo de drogas inyectadas, principalmente heroína, con el propósito de que no se compartan jeringas y así evitar enfermedades de transmisión como el sida o la hepatitis.
Censo
Otro de los trabajos que adelanta la Secretaría de Desarrollo Social de Pereira, tiene que ver con el censo de indigentes.
El titular de este despacho señaló que en la ciudad no hay la cantidad de personas que se pensaba bajo esta condición, porque si bien la cifra del ‘conteo’ hablaba de cerca de 2000 integrantes, muchos son censados hasta 2 y 3 veces debido a su característica de flotantes, de hecho, muy pocos tienen documento de identidad.
Es necesario diferenciar en el municipio las 2 clases de esta población: los que además de caminar la calle todo el día duermen en esta y los que simplemente piden monedas o consumen alucinógenos en las vías públicas.
Entre algunos datos arrojados por el censo que se efectúa en el día y la noche, se destaca que el 70 % de los habitantes de calle en la capital risaraldense no son de la ciudad, sino que vienen de otras localidades del país, especialmente de Medellín, Manizales y Cali, no solo por las condiciones climáticas de Pereira, también por la generosidad de la ciudadanía, según señaló Lemus Mosquera.
En lo corrido de este año, cerca de 20 adultos mayores en condición de calle, fueron llevados a centros de atención al anciano.
Albergue para habitantes de calle
En aproximadamente 15 días entraría a funcionar el albergue para habitantes de calle en Pereira. Este lugar quedaría ubicado en el barrio 20 de Julio, cerca a la estación de servicio del puente Mosquera.
El sitio tendrá la capacidad de recibir hasta 100 personas de la población mencionada. Allí recibirán atención integral y en caso de que lo soliciten se podrá comenzar con el proceso de rehabilitación porque la mayoría de estás personas tienen problemas con el abuso de sustancias alucinógenas.