Un total de 40 vendedores ambulantes y estacionarios fueron objeto de inspección, vigilancia y control por parte de técnicos de la Secretaría de Salud y Seguridad Social.
Los operativos contaron con el apoyo del personal de la Policía Nacional, quienes se encargaron de que no se presentarán situaciones anormales de orden público.
Entre las labores realizadas se verificaron que los comerciantes contarán con el certificado y o el carné de manipulación de alimentos y que portarán adecuadamente los elementos de protección personal como gorro, tapabocas, delantal de colores claros, zapatos cerrados y guantes de ser necesario.
También fue inspeccionada la limpieza, el estado de los equipos, utensilios, conservación y protección de los alimentos.
En cuanto a las condiciones higiénicas locativas se pudo constatar que algunos no cumplen con las normas mínimas sanitarias, al igual que inadecuadas prácticas de algunos manipuladores. Por tal motivo, dicha dependencia estableció un plan de mejora, donde se pactó una reunión de sensibilización y capacitación.
