
Desmedidos esfuerzos por ayudarlo, hizo la compañera sentimental de Edwin Adolfo Ocampo Galeano de 22 años de edad, después de descubrir que él había tomado la fatal decisión de decirle adiós al mundo, al ahorcarse con un pedazo de cable de la energía en el taller donde actualmente trabajaba y era socio en compañía de un amigo.
Versiones no oficiales indican que a pesar de que su novia cortó el elemento que había usado él para suicidarse, y en compañía de su hermana intentaron reanimarlo, los esfuerzos fueron en vano, pues Edwin ya no tenía signos vitales.
Los hechos se registraron en la mañana de ayer cuando Lady Jhoana y su cuñada, al notar la ausencia de Ocampo Galeano en la casa, decidieron ir a buscarlo al lugar de trabajo cerca de las 6:00 de la mañana de ayer. Fue en el local que está ubicado en la carrera 32 con calle 11 de la ciudad de Pereira, donde el se desempeñaba hace tres meses como técnico en acrílicos, donde con la puerta semi abierta, las mujeres encontraron colgado al hombre.
Aunque no se conocen las verdaderas razones que llevaron a la muerte a este joven, según conoció El Diario del Otún, Edwin Adolfo al parecer llevaba días discutiendo con su novia, quien al parecer le había dicho que le terminaría y probablemente serían su decisión tuvo que ver con esto, ya que le dejó una carta despidiéndose.
Por su parte, su amigo y socio Elicer dijo a este medio de comunicación, que el joven nunca le llegó a manifestar tener problemas graves o que estuviera aburrido, además de comentar que la última vez que había hablado con Edwin había sido el miércoles, día en el que quedaron de ir a jugar un partido de fútbol al cual Edwin le sacó el cuerpo y no habían vuelto a conversar desde ese día.
El levantamiento del cuerpo y la inspección del lugar la realizó el Cuerpo Técnico del CTI de Pereira, quienes trasladaron el cuerpo a las instalaciones de Medicina Legal en Pereira.
Vida
Edwin Adolfo era natural del municipio de Belén de Umbría, era alegre, trabajador, rumbero, familiar, cariñoso, apasionado al fútbol e hincha fiel del Atlético Nacional, vivía en el barrio Corocito de la capital risaraldense, en compañía de su novia y su hermana. Su familia vive en el municipio de Belén de Umbría y el Valle del Cauca, quienes aún no se explican como su ser querido acabó con su vida y dejó un gran vacío en su familia.