Por cada 100 personas que son ocupadas en el mercado laboral pereirano, un total de 42 son incorporadas en puestos de trabajo en los que se subvaloran sus competencias, así lo dio a conocer Jhonier Cardona Salazar, director de Investigaciones de la Facultad de Ciencias Económicas y Contables de la Unilibre.
El investigador económico resaltó que es evidente que muchas de estas personas realizan actividades que muy poco exigen de su formación, obteniendo a la vez remuneraciones que no compensan el esfuerzo realizado al formarse.
Sin embargo y pese al difícil panorama que se evidencia en la ciudad, esta realidad se acentúa mucho más en departamentos donde el índice de desocupación es inferior al promedio nacional, tal es el caso de Santander y Atlántico.
“El caso más preocupante en lo que atañe al empleo inadecuado por competencias se registra en el Departamento de Santander donde por cada 100 personas ocupadas, 73 de ellas se emplean entrabajos subvalorados. En segunda instancia se encuentra el Atlántico donde el guarismo es de 50 personas por cada 100 personas ocupadas”, afirmó.
Cardona resaltó que a pesar de que estos departamentos evidencian avances en ocupación laboral, la generación de empleo no es acorde a las necesidades de los ciudadanos, “en el departamento del Atlántico el empleo inadecuado por competencias evolucionó del 2001 al 2011 a una tasa media anual del 15 %; Santander lo hizo a una media del 23 % y en Risaralda al 20 %, esto lo que demuestra es que en los tres entes territoriales cada vez más se agudiza la discrepancia entre las necesidades laborales que tienen los sectores productivos y la formación brindada a la población”.
Para Cardona a pesar de que Santander y Atlántico específicamente en sus áreas metropolitanas han presentado las más bajas tasas de paro en los últimos tiempos, también son a la vez en donde más se subvalora la fuerza de trabajo, lo que demuestra la baja calidad del empleo que se genera.
En lo referente a la informalidad laboral, explicó que del total de la población ocupada en el Departamento de Santander un 59 % lo hace en esta condición, mientras que en el Atlántico y Risaralda el índice de informalidad alcanza el 58 % y 51 % respectivamente.
“Lo expuesto en lo referente al empleo inadecuado por competencias y la informalidad laboral deja muy mal parados a los Departamentos del Atlántico y Santander frente al de Risaralda, donde este último, aunque ha mostrado tasas de desempleo superiores, no refleja tanta precariedad en la calidad de la ocupación como sí lo muestran los primeros”, explicó.
