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Pereira - Así se pasan por la galleta al Transito Municipal


Julián Caleño
Muchos no entendemos, como la oficina de Transito Municipal este permitiendo algunos abusos y el desconocimiento absoluto de varias de sus disposiciones tomadas para regular el flujo vehicular y el orden en las vías de la ciudad, por los taxistas y algunos conductores particulares que se las pasan olímpicamente por la galleta. Nadie ignora las dificultades del tráfico en la Avenida Circunvalar, donde con el fin de organizarlo, se prohibió el estacionamiento de taxis y de toda clase de vehículos. En algunos lugares existen unas señales de prohibido estacionar, muy visibles y notorias, como las que se pusieron frente al nuevo Centro Comercial La Arboleda, pero las mismas no se respetan y es posible ver diariamente una gran cantidad de taxis allí estacionados, estorbando el flujo de vehículos, con la complacencia cómplice de los funcionarios de esa oficina, muy diligentes en el empleo de unas grúas matriculadas en otros municipios, que lógicamente no pagan sus impuestos de rodamiento a Pereira, donde se lucran de los contratos pertinentes, que les permiten unos cobros descarados y abusivos por el traslado a los patios de los vehículos que tienen la desgracia de caer en sus manos, pero indolentes y permisivos con esos infractores a quienes nos estamos refiriendo. No quisiéramos pensar, que esas infracciones se toleren por miedo a perder algunos cargos, ante las posibles influencias de connotados dirigentes empresariales y políticos. Ese sector cuenta con algunas vías secundarias que permanecen desocupadas, donde estos vehículos de trasporte público pueden esperar a los usuarios sin causarles traumatismos, ni incomodidades. Igualmente en el centro de la ciudad, nada hacen los famosos guardas, para impedir que los conductores paren sus vehículos en las bocacalles, para no perder la luz verde, sin importarles que el trafico este detenido adelante y cuando el semáforo pasa a rojo, quedan atrapados en esos cuadrantes, causando unos trancones de miedo, como el que ocurre permanentemente en el cruce de la calle diecinueve con la carrera decima. Otras infracciones que no son controladas adecuadamente, son el exceso de velocidad de algunas busetas, que pasan desbocadas por la carrera quinta, y en ocasiones por el Megabús en la sexta, que amenaza con causar una tragedia. Ojala que esto se solucione pronto.