pereira

Vanessa Posada, a un paso de ganar el Desafío 2015 - El Diario del Otùn - Septiembre 24 2015 - ciudadpereira.com

Viviana Llanos
El Diario del Otún



Su participación en el programa ha dejado en alto el nombre de la capital risaraldense debido a su paciencia, sabiduría y agilidad, cualidades que caracterizan a los hijos de esta ciudad.

Esta es la historia de la pereirana :

Vanessa Posada Vargas de 22 años, es la pereirana que representa al departamento de Risaralda en el Desafío India 2015, del canal Caracol. 
Ella cursa séptimo semestre de Ingeniería Industrial en la Universidad Tecnológica de Pereira, UTP, y su permanencia en el reality se debe al entrenamiento personal que tuvo en el gimnasio Onef, ubicado en el barrio Pinares de la capital risaraldense.


En entrevista con El Diario del Otún, Vanessa dejó ver su lado sensible y familiar, acompañada de la valentía y berraquera que la ha caracterizado desde muy pequeña.


“Soy muy alegre, soñadora y hago lo que sea para cumplir mis metas trazadas; orgullosamente pereirana, vivo solo con mi mamá quien me ha sacado adelante y me ha enseñado a enfrentar la vida, pues mi papá murió hace 9 años. Tengo un hermano y un sobrino al que adoro”, manifestó la joven extrovertida, quien además tiene una microempresa donde elabora tapetes y accesorios artesanales, por medio de esta ayuda a las mujeres cabeza de hogar contratándolas para que le colaboren en el proyecto debido a sus ocupaciones y participación en el programa. Aclaró que esto es algo adicional para generar ingresos.


“Todo lo que he aprendido en la universidad lo aplico en mi microempresa, dejo todo listo para agilizar los pedidos encargados y los trabajos personalizados”, acotó la estudiante de ingeniería, a quien le encanta el deporte y lo tomó como un estilo de vida por el gimnasio, donde encontró un apoyo incondicional con respecto a la dedicación y disciplina que debe tener una persona para llevar a cabo sus sueños.


La joven sostuvo que además de estudiar y trabajar, entrena diariamente y monta bicicleta para tener una vida saludable. Actualmente tiene novio y llevan 10 meses de relación, él es pereirano, Vanessa lo considera su cómplice y amigo porque ha sido un soporte para ella, igual que su familia.

Desafío 2012
La experiencia que tuvo Vanessa en El Fin del Mundo 2012, tuvo  un impacto especial en su vida, pues desde el principio demostró lo luchadora que es y dejó en alto a los cafeteros que por primera vez tuvieron participación en el reality.


“Siempre me había visto en el Desafío y una vez ví en el periódico que iban a salir las convocatorias, aproveché para representar al Eje Cafetero y demostrar la tenacidad de la región, así que hice la fila de siete horas y de tantas personas que se presentaron de Pereira y Manizales me enorgullece que me hayan escogido a mí, una niña común y corriente.

En la competencia entregué todo como siempre y aunque me fue bien, quedé en el  puesto décimo, hice una buena representación y me llamaron para reencarnar en el Desafío de la India”, agregó que en esa época no tuvo una completa preparación para enfrentarse a las pruebas y ganar.
Aclaró que la fortaleza mental se debió a la práctica de yoga y meditación, pues adquirió resistencia y supo controlar sus emociones.

Va por la final
Vanessa se encuentra en el equipo Cobra del Desafío India 2015, una de las más duras pruebas es enfrentarse diariamente a los 52 grados de temperatura y a las diferentes costumbres que tienen las personas en este lugar.


El reality, en esta etapa,  ya no se enfoca en la supervivencia, sino en el intercambio de culturas y en la forma como cada participante se debe adaptar a la India, pues allí el ingrediente principal de los alimentos es el picante y se come con la mano.


“Admiro el sentido de pertenencia que tienen estas personas con su vestimenta y demás costumbres, con seguridad lo llevaré a mi país porque he aprendido esto de ellos”, mencionó.
Uno de los sueños de esta mujer es darle mejor calidad de vida a su mamá y trabajar en pro de Pereira.


Foto tomada de Caracol Televisión