
La Catedral de Nuestra Señora de la Pobreza es hoy un espacio temático en materia de fe, historia, arquitectura, arqueología, cultura y arte, con el atractivo de que los contenidos cambian conforme avanzan las investigaciones.
La edificación de la Catedral Nuestra Señora de Pobreza, inicia en 1890, en el predio que ocupa actualmente, el costado de la Calle 20 con carrera 7ª, gracias a la proyección del padre Ismael Valencia quien estuvo al frente de la obra durante cuatro años y a quien reemplazó el padre López.
Luego, el 31 de enero de 1906 un terremoto destruyó el templo y la iglesia parroquial fue improvisada en una casa. Debido a este infortunio, la iglesia sufrió muchos daños y para la reconstrucción del templo se tomó la decisión de abandonar la idea de edificarla totalmente en ladrillo y piedra como se pretendía en un principio, a causa del riesgo sísmico en la zona.
Esto produjo una reforma de estilos y técnicas en la construcción de la iglesia, basada en referentes arquitectónicos de la cultura europea, con materiales en láminas metálicas y yeso y no en piedra, ya que esta escondería la estructura de bahareque, elemento propio de la cultura indígena de la región.
Bajo estos parámetros, no sólo fue construida la Catedral de Pereira sino también otras iglesias en Manizales, Circasia, Armenia, Tadó, Quinchía, Filandia, entre otras, siendo una técnica común en la zona de influencia caldense en 1893.
Los claretianos
A finales de 1917, llegó a la ciudad la comunidad claretiana, que por encargo del entonces obispo de Manizales, monseñor Hoyos, estuvo encargada de la dirección del templo de Nuestra Señora de la Pobreza y se designó como párroco al padre Federico Martínez a quien se le debe en gran parte la terminación del templo y algunas decoraciones de importancia. Esta comunidad estuvo al frente de la Catedral hasta 1948.
Durante el tiempo en que los claretianos estuvieron en cargados del templo, se colocaron los lienzos del techo que fueron pintados por J. Moreno en 1932, así como los vitrales que fueron traídos de Bélgica y el primer reloj del campanario.
Así mismo, precedentes de Europa llegaron el santo Cristo que se encuentra en la capilla del Misericordioso y las láminas de Zinc troquelado que luego fueron reemplazadas en 1963 por laminas de aluminio.
De igual forma, Lisandro Tirado trabajó en los capiteles de madera de comino crespo. Luego, para 1948, se iniciaron las pinturas de los querubines en la cúpula del crucero y de los evangelistas en la parte inferior.
Diócesis de pereira
A petición del Nuncio monseñor Antonio Samoré, en el año 1900 Pereira se separó de la arquidiócesis de Popayán. El papa Pío XII firmó la autorización para la creación de las nuevas diócesis de Pereira y Armenia el 17 de diciembre de 1952, luego el 10 de mayo de 1954 se constituyó la diócesis de Pereira, siendo el primer obispo monseñor Baltasar Álvarez Restrepo.
Este hecho, incentivó a muchos a solicitar al Congreso de la República la creación del departamento de Risaralda y su separación de Caldas. En 1966, mediante la expedición de la Ley 70, nace el nuevo departamento, conformado por Pereira y trece municipios más.
Las modificaciones que ha sufrido la Catedral han sido hechas bajo los criterios y gustos de los sacerdotes que han tenido el templo bajo su mando. Así por ejemplo, los altares de madera de las naves fueron reemplazados por mosaicos hechos por la comunidad benedictina.
El valor patrimonial de esta iglesia lo confirman los hallazgos arqueológicos que se evidenciaron en las excavaciones realizadas para la reconstrucción del templo después del terremoto del 25 enero de 1999, que le dio a los pereiranos un redescubrimiento de su historia pero ahora con un soporte arqueológico para todos los cronistas e historiadores.
En la actualidad, la Catedral, parte fundamental del patrimonio cultural y arquitectónico de Pereira, se encuentra en un proceso de mantenimiento ya que ha presentado problemas de humedad, afectando gran parte de la estructura de madera de la cúpula.
El Reloj
“Desde el terremoto de 1999, es decir hace 14 años, el reloj de la Catedral Nuestra Señora de Pobreza dejó de funcionar. El próximo 15 de agosto, en conmemoración de los 150 años de Pereira harán entrega de los relojes para que estos vuelvan a funcionar”, expresó el Padre Nelson Giraldo Mejía.