Carlos Yesid Cubides
El Diario del Otún
Cerca de 80 personas se reunieron el miércoles en la noche para celebrar el primer conversatorio sobre discapacidad denominado “Desde el ser mismo,” evento organizado por la Fundación María Teresa Vasco.
Además de escuchar los impresionantes testimonios de superación por parte de hombres y mujeres que han sido el apoyo incondicional y desinteresado de la fundación, Julián Rincón Román, arquitecto y socio de la fundación, puso en la mesa de discusión un tema que cuestionó los planes de ordenamiento territorial en ciudades como Pereira y Bogotá, ya que de acuerdo a su percepción, la actual logística en las ciudades excluyen las reales necesidades de movilización e interacción de los discapacitados.
Y es que de acuerdo a las opiniones que se debatieron en el teatro de la Fundación Universidad del Área Andina, la arquitectura actual así como los medios de transporte masivo tipo Megabús o Transmilenio, excluyen a las personas en situación de discapacidad. Con ejemplos gráficos y fotografías dicientes, el profesional cuestionó la forma en que las autoridades locales y nacionales han venido manejando los temas operacionales y de infraestructura los cuales desconocen las necesidades de movilidad y calidad de vida de las personas con discapacidad.
“El tema de la discapacidad debe ampliarse a todas las instancias de la sociedad ya que no estamos garantizando el derecho que tienen todos los seres humanos a movilizarse. Sólo nos hemos concentrado en las necesidades de las mayorías y se nos ha olvidado que también existen otras minorías que necesitan que se garantice el derecho constitucional de la igualdad para todos.” Aseguró Román.
Una gran obra
Es importante destacar la obra que la fundación ha venido desempeñando desde que fue fundada, hace aproximadamente cuatro años. Hombres y mujeres sin esperanza de vida y postrados a una cama han podido encontrarle sentido a sus vidas y lograr desarrollar potenciales adormecidos por la indiferencia de otros.
“Qué bueno sería ponerse en los zapatos de las personas que con amor ayudamos, qué bueno sería contar con la ayuda de los empresarios y de las personas comunes y corrientes para seguir dándole esperanza a tantos niños, hombres y mujeres que no sólo han perdido capacidades motrices sino también sus esperanzas para soñar y para seguir. Necesitamos de gente con corazones sensibles que quieran ayudar a seres humanos maravillosos que necesitan que sembremos en ellos”, comentó Eibar Gutiérrez, directora y una de las fundadoras de esta obra.
Gracias a esta fundación, se ha podido ayudar a personas que no tienen ni los medios ni los recursos económicos para recibir sus respectivas terapias o para solventar gastos como el de pañales, sillas de ruedas o muletas.
Historias de vida
Hamilton Ramírez es uno de los beneficiados y cuenta cómo antes de conocer la fundación ya había perdido todos sus deseos de vivir. Postrado a una silla de ruedas y sin forma de cumplir su sueño de convertirse en un profesional en administración pública, Hamilton llegó a pensar que la muerte sería su única solución. Luego de conocer a este grupo, pudo recobrar sus esperanzas, es así como gracias a los aportes hoy Hamilton cursa tercer semestre en la Escuela Superior de Administración Pública. “Hoy gracias a ellos pude volver a soñar y creer que todavía hay esperanza para un mañana que viene con buenas nuevas”, afirmó Hamilton.
Libardo Bedoya es otro valioso ejemplo de superación. Debido a una penosa enfermedad perdió la movilidad de sus pies y por siete años vivió postrado y sin sueños. Luego de varias terapias facilitadas por la fundación, éste hombre desarrolló dones y talentos que no conocía. Sus pesebres, pinturas y figuras ya son conocidas y comercializadas. Próximamente Bedoya publicará un libro con sus vivencias e historia de vida, ya varias editoriales se han mostrado interesadas en su excelente relato. Hoy día además creó una fábrica de trapeadoras con la que subsiste.
Los integrantes de la fundación hacen extensiva la invitación para que hagan llegar sus donaciones en dinero y en dotación a los teléfonos 3257239 3335112, 3344352. La idea es continuar ayudando a darle esperanza a cientos de personas en situación de discapacidad que hoy necesitan el aporte generoso de corazones nobles y sensibles para ayudar.
